miércoles, 15 de septiembre de 2010

COMUNISMO





Karl Marx vio el comunismo primitivo como el estado original cazador-recolector de la especie humana del que surgió el comunismo temprano. Para Marx, sólo después de que la humanidad fue capaz de producir excedentes (y de que algunos miembros de la sociedad se apropiaron de ellos), se desarrolló la propiedad privada y el Estado. Se designa con esta expresión a todas las doctrinas premarxistas, que con muchísima diversidad, se las puede englobar como utopías sociales que abogaban por la propiedad colectiva (a diferencia de un régimen de propietarios iguales) y la igualdad total (incluyendo todas las necesidades) de todos los productores.2 Tales doctrinas primitivas resolvían el problema de las relaciones del individuo con la sociedad a través de la «sociedades de iguales», que bien podía ser una comuna, el Estado, etc.
Tales doctrinas se desarrollaron en la Época Clásica y en la Edad Media. Un ejemplo de comunismo igualitario es el implantado en Esparta por Licurgo también designado como comunismo militar. 



Este gobierno sólo consideraba como «iguales» a los ciudadanos de la polis, ya que mantenía un régimen esclavista.
Otro ejemplo de ciertas doctrinas comunistas en un marco antiguo son las propuestas por Platón en La República
El comunismo como tradición política e ideológica surge a partir del siglo XVIII impulsado por las fuertes contradicciones sociales en Europa. Durante el gobierno del Directorio (1795-1799) en la Francia revolucionaria François-Noël Babeuf lleva a cabo la Conjuration des Égaux (Conspiración de los iguales), la primera acción revolucionaria llevada a cabo en nombre de una ideología comunista. El babuvismo proponía la abolición de la propiedad privada, la instauración de la propiedad comunitaria para asegurar la única y verdadera igualdad, no sólo política, sino también económica. El movimiento, claro está, fue salvajemente reprimido, si bien su pensamiento resistió el paso del tiempo y engendró la mayoría de los comunismos posteriores.


Sobre 1835, las ideas comunistas prosiguieron su desarrollo fuertemente vinculadas al concepto de socialismo,2 a partir del llamado socialismo utópico(también denominado comunismo utópico), siendo sus principales exponentes Robert Owen, Charles Fourier y Saint-Simon.
Robert Owen fue el primer autor en considerar que el valor de los productos debía medirse con base al trabajo incorporado a ellos, y no al valor en dinero que se les atribuye. Charles Fourier fue el primero en proponer la abolición del capitalismo para la formación de una sociedad comunista. Y el Conde de Saint-Simon consideró que la nueva sociedad debía estar planificada para atender las necesidades de los pobres. Estos autores propusieron la transición hacia nuevas sociedades a través de comunidades rurales autosuficientes por el trabajo de voluntarios; sin embargo, no consideraban que la sociedad capitalistaestuviera compuesta por clases sociales antagónicas.
Para Marx y Engels, la clase obrera industrial es la única que, por su imposibilidad de una adquisición privada, puede superar mediante la síntesis comunista la contradicción sin salida de la socialización estatal: es la negación comunista de la sociedad porque no puede transformarse en nueva clase explotadora, es la negación comunista del Estado porque sólo transformándose ella misma en poder público puede superar su carácter asalariadoremanente de la sociedad burguesa, y es la negación comunista de la propiedad porque sólo distribuyendo de acuerdo a las necesidades y las capacidades puede adquirir los frutos de los medios de producción.10 De ello se deriva el lema De cada cual, según sus capacidades; a cada cual según sus necesidades.
El Manifiesto Comunista es considerado uno de los tratados políticos más influyentes de la historia.



En la Asociación Internacional de los Trabajadores se evidenciaron los conflictos ideológicos entre anarquismo y marxismo. La principal diferencia entre estos dos grupos fue que los marxistas proponían un período de transición después de la revolución social antes de la disolución final del estado, idea que los bakuninistas no aceptaban considerando que la revolución debía acabar inmediatamente con el estado. El resultado final de esta división fue la expulsión de los anarquistas y anarcosindicalistas de la Primera Internacional y su posterior disolución en 1876.
El anarcocomunismo es una corriente anarquista cercana al comunismo, representada entre otros por Pedro Kropotkin y Errico Malatesta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario